En el país vasco-francés es muy importante la obra en verso de Jules Moulier («Oxobi»), recientemente fallecido. Lírico de voz poderosa (Heiatik zerura, etc.), ha sido además en sus Alegiak (Bayona, 1926) el mejor fabulista en lengua vasca. Por su vivacidad, por la maravillosa flexibilidad y poder expresivo del lenguaje, constituyen una verdadera creación en un género que casi por definición es tan poco original.